Por mucho que los refugios de animales intenten proporcionar amor y comodidad a sus animales, a veces es mucho más difícil de lo que parece.
Muchos animales no pueden prosperar en un entorno abarrotado ya que requieren más atención y amor enfocados.
Por eso los hogares de acogida son tan importantes. Proporcionan un lugar tranquilo donde los perros pueden socializar, recibir más atención y recuperarse mejor de cualquier trauma que puedan haber sufrido anteriormente.
La prueba de esto se encuentra en la historia de hoy, en la que una dulce perrita aprendió a amar la vida de nuevo, gracias a sus cuidadores cariñosos.
Conoce a Holly
Cuando una mujer llamada Janae estaba visitando el Refugio de Animales de Dallas, conoció a alguien realmente especial.
Una adorable perra callejera rescatada llamada Holly era uno de los residentes del refugio. Y, a pesar de que estaba extremadamente desnutrida y no podía ver por un ojo, esta hermosa perrita atrajo la atención de Janae.
“No estaba corriendo hacia la ventana como la mayoría de los perros lo hacen, para llamar la atención. Le pedí al voluntario si podríamos sacarla al patio solo para sacarla del kennel y pasar algo de tiempo con ella,” dijo Janae a GeoBeats.
Cuando el voluntario se acercó a ella para sacarla del kennel y tan pronto como vio una correa, Holly se asustó mucho.
Para poder sacarla, otro voluntario tuvo que recogerla y llevarla al patio.
Sin embargo, tan pronto como olfateó el aire fresco, Holly no pudo contener su emoción.
“Una vez que estábamos en el patio, simplemente comenzó a correr y estaba tan feliz de estar afuera. Había otro perro en el otro lado y podían verse a través de la reja. Y ella comenzó a hacer invitaciones de juego y quería jugar con él,” agregó.
Pero, su felicidad pronto sería arruinada.
Debido a que el refugio estaba lleno y ella estaba herida, el refugio de Dallas la consideró no adoptable y la programó para eutanasia.
“Llamé a mi esposo y le dije ‘No quiere volver allí, no puede quedarse aquí. Lo siento mucho, pero tenemos que llevar a casa otra acogida.’” dijo Janae.
Nueva Vida
Tan pronto como Janae dejó el refugio con Holly, la llevó al peluquero para un baño. Y, después de que estuviera bien bonita y limpia, fueron directamente a una tienda de mascotas en Dallas para algunos juguetes lindos.
Pero, cuando llegó a la casa de Janae, se puso un poco nerviosa.
Durante sus primeros días en su nuevo hogar de acogida, todo lo que hacía era meterse en la esquina y esconderse del mundo.
Pero afortunadamente, no le tomó mucho tiempo salir de su caparazón.
Janae y su esposo ya habían adoptado perros antes, así que cuando Holly los conoció, estaba encantada con el hecho de que tenía buena compañía.
“Ellos la ayudaron a saber que estábamos a salvo y que nuestra casa era un lugar seguro para ella,” dijo.
Ahora a Holly le encanta pasar tiempo afuera con sus hermanos perros, jugando al pilla-pilla todo el día. También le encanta ser una perezosa en el sofá, acurrucándose con sus humanos en el sofá siempre que tiene la oportunidad.
Hogar para Siempre
Después de pasar un año acogiendo a Holly, Janae y su esposo se enamoraron más y más de ella.
Sabían que siendo tan preciosa como era, Holly necesitaba ser parte de la familia más perfecta. Y, eso es exactamente lo que sucedió.
“Esta adopción vale un millón de veces la espera por la familia más perfecta. Sus maravillosas personas la vieron en Facebook y viven en el estado de Washington. Perdieron a su hermoso perro a principios de este año, la dulce Georgia, que era una alumna de DPA,” escribió Janae en una publicación de Instagram.
Holly finalmente está donde se suponía que debía estar todo el tiempo: parte de una familia amorosa que la ama y adora con todo su corazón.
¡Buena chica, Holly!